Tanto perros como gatos, pueden sufrir la caída del pelo o alopecia, y esta caída puede ser normal en ciertos períodos climáticos, especialmente en los meses de primavera y otoño.
El pelaje tiene un ciclo de vida muy corto en el que crece, muere y luego termina cayendo.
Una forma de mantenimiento del pelaje de tu mascota es el cepillado, que reactiva sus fibras capilares. Sin embargo, cuando la caída del pelo se vuelve excesiva y deja al descubierto la piel, comienzan nuestros motivos de alarma.
Hay muchas razones para la pérdida excesiva de pelaje en perros. Y una de las más comunes es por la presencia de parásitos u hongos que causan enfermedades en la piel, pero también hay otras fuentes de origen de la alopecia como pueden ser el estrés, envejecimiento del animal, trastorno hormonal, alergia, una dieta deficiente o desbalanceada y cáncer de piel.
Los parásitos de la piel son las pulgas, ácaros, garrapatas o piojos. Estos insectos se alimentan de la sangre de nuestros perros y causan la caída del pelaje a medida que se incrustan en su piel. La alopecia también puede ser causada por la presencia de hongos microscópicos, estos parásitos u hongos son causantes de enfermedades de la piel que provocan una caída excesiva del pelo hasta que la piel se vuelve visible, causando la denominada alopecia areata.
La sarna es una enfermedad de la piel causada por un ácaro microscópico. Es muy contagiosa como también lo es la tiña, una enfermedad fúngica que causa picazón y caída del pelaje, esta enfermedad puede transmitirse por el contacto de piel a piel.
Por ser muy ansioso o sufrir de estrés tu perro puede perder su pelaje en grandes cantidades. Un cambio radical en sus hábitos diarios puede estresarlo. Un factor responsable de generar ansiedad en un perro es la ausencia de un familiar o la llegada de un hijo a la familia, pues se siente abandonado de un momento a otro. También se suma la llegada de otro animal a casa que perturbe el modo de vida de tu perro, le generará estrés porque puede sentirse desplazado.
Tu perrito también va a perder pelo a medida que envejece. Ciertas patologías más o menos graves relacionadas con la edad favorecen la abundante pérdida del pelaje. Puedes darte cuenta cuando tu perro envejece por sus bigotes en el hocico, estos comienzan a volverse blancos. En perros con el pelaje de colores oscuros verás como su pelo encanece en diversas zonas, especialmente en el morro, cerca de la trufa.
Como el crecimiento del pelo de tu mascota está regulado por la influencia de las hormonas, los trastornos de éstas pueden originar una excesiva alopecia. La diabetes mellitus es un ejemplo de enfermedad hormonal responsable de la caída del pelo. Esta enfermedad crónica puede tratarse con una prescripción dietética, ejercicios y medidas para regular la producción de azúcar en la sangre de nuestro amigo perruno.
Tu perro puede tener una reacción alérgica a las picaduras de pulgas. Esta alergia generará en nuestros perros una picazón severa y alopecia debido a que se muerden y rascan la piel constantemente.
Debemos ofrecer a nuestro perro una dieta balanceada y acorde con su tamaño y edad. De esta forma no solo lo protegemos de deficiencias alimenticias, sino de la alopecia. Al alimentar a nuestras mascotas con comida no apta para perros es posible que generemos en él la caída del pelo. Los veterinarios recomiendan una dieta rica en omega 3 para el fortalecimiento capilar.
La pérdida excesiva de pelo es uno de los síntomas de una enfermedad más grave, como lo es el cáncer de piel. Si observas que su piel desnuda presenta protuberancias y engrosamiento anormal consulta de inmediato con el veterinario.
Los parásitos u hongos en perros les genera picazón. Las picaduras de pulgas harán que tu perro se rasque y muerda, esto además de provocar la caída del pelo les causa lesiones en la piel. La sarna también causa picazón y llagas.
Cuando tu perro se rasca o lame constantemente la piel se va enrojeciendo, aparecen costras, abrasiones, caída del pelo, engrosamiento de la piel y en algunos casos infecciones cutáneas.
Por ejemplo, con diabetes mellitus, tu perro beberá más agua de lo habitual y orinará con frecuencia.
No está ligada directamente a la alopecia pero si tu perro no se acerca a su cuenco de comida puede deberse a distintos factores que va desde lo psicológico a lo corporal.
La apatía se caracteriza por falta de energía, pérdida de motivación e indiferencia hacia las emociones. La alopecia por lo general es un síntoma generado por otra enfermedad, observa de cerca el estado de ánimo de tu mascota. La falta de energía se puede vincular con una enfermedad en su cuerpo y con depresión.
Si tu mascota está perdiendo con exceso su pelaje, lo mejor es consultar a un veterinario. Él podrá orientarte el tratamiento adecuado según el origen de la alopecia para proceder a su eliminación.
Dependiendo de su diagnóstico, el veterinario puede aconsejarte que le des a la mascota complementos alimenticios a base de vitaminas, minerales (azufre, zinc) y ácidos grasos (omega 3 y 6), ellos van a aminorar su caída y fortalecerán su cuero cabelludo.
Si la excesiva caída del pelo se debe a un parásito como pulgas o garrapatas, el veterinario te recetará un antiparasitario que puede ser en forma de collar, spray, pipeta, champú o pastillas.
También puedes aplicar un tratamiento de aceite elaborado con ingredientes de origen natural a la piel del perro. El aceite ayudará a calmar el efecto de la picazón y, a su vez, ralentizará la caída del pelaje, promoviendo su crecimiento.
La pérdida de pelaje en un animal es normal hasta cierto límite. Si tu perro presenta problemas cutáneos atípicos, y comportamiento inadecuado, debes consultar sin dudarlo a un veterinario y seguir sus consejos.